El Pleno del Ayuntamiento de Estella-Lizarra va a censar los bienes de la Iglesia y de otras confesiones religiosas con el objetivo de girarles el cobro de la contribución urbana de aquellos inmuebles o fincas que no estén destinados al culto.
Así, la propuesta de IU, Bildu, NaBai, PSN y el edil no adscrito Jesús María Chasco salió adelante a pesar de los votos en contra de PP y UPN.
Los impulsores de la propuesta explicaron que «en una situación económica como la que atravesamos actualmente todavía se entiende menos que determinadas entidades tengan una serie de privilegios fiscales», indicaron estos grupos que quisieron destacar que esta medida no «pretende castigar a las entidades religiosas, sino avanzar hacia la igualdad ante la ley y la no discriminación». Estos partidos recuerdan que fue el Parlamento de Navarra quien aprobó el 31 de enero un cambio en la Ley Foral de Haciendas Locales para modificar el artículo que eximía de pagar contribución a los bienes de la iglesia. Estos grupos recuerdan también que en Ourense un juzgado ha sentenciado que la Diócesis debe pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles por cuatro fincas urbanizables al entender que no estaban entre los bienes exentos por ley. Estos son básicamente los templos, capillas y los edificios anexos, las residencias y locales de oficinas y los seminarios y universidades.
UPN y PP votaron en contra de esta propuesta y los regionalistas lo justificaron alegando que la labor de la Iglesia justifica este régimen fiscal y nombró a Cáritas y a las Hermanitas de los Pobres. También aseguró que Navarra «no puede tomar una decisión en este sentido» y argumentó que esto se encuentra regulado por tratados internacionales.
Diario de Noticias, 08/03/2013